Diputadas demandan a Manuel Andrade

Carlos Sayago
08/04/201705:00:50

La notificación de las autoridades correspondientes llegó el pasado jueves a la oficina del priísta en la sede legislativa, sin embargo éste no se encontraba presente

Por haberlas llamado “Chapulinas”, “Saltarinas” y otras lindezas, el diputado Manuel Andrade Díaz fue demandado por las diputadas Patricia Hernández Calderón y Zoila Margarita Isidro Pérez a quienes atribuye los calificativos a causa de que renunciaron a su militancia al Partido Revolucionario Institucional, decisión que aseguran las legisladoras, tomaron en uso de sus derechos constitucionales como ciudadanas libres. La notificación de las autoridades correspondientes llegó el pasado jueves a la oficina del priísta en la sede legislativa, sin embargo éste no se encontraba presente.
Y ahí en el tercer piso de la sede legislativa, solo se vio el oficio que se supone que es un citatorio para Andrade Díaz, mismo que podrá ignorar porque como legislador tiene fuero constitucional y no se le puede molestar con una demanda que a cualquier simple mortal podrá hacer temblar, podrá inquietar o incomodar pero no a un diputado y encima ex-gobernador que incluso se puede dar el lujo de llamar “ignorante” a cualquiera de sus homólogos…
Las legisladoras aludidas por Andrade Díaz, como se recordará renunciaron a su militancia priísta el año pasado para convertirse en independientes y en diciembre se afiliaron al Partido de la Revolución Democrática, lo que provocó la crítica de sus ex-compañeros del PRI a quienes seguramente dolió que hayan renunciado a esa militancia, pero más les dolió el que se hayan afiliado al PRD y más aún les pudo, el intento de engrosar la fracción del Sol Azteca hasta que la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) c0onsideró que no procedía y les respetó que sean perredistas pero no que se sumen a esa bancada.
Pero con esa demanda tampoco pasará nada, por la cuestión del fuero, a menos que las legisladoras la lleven a la tribuna y le den, una sopa de su propio chocolate y lo exhiban como él, Andrade Díaz acostumbra hacerlo con sus antagónicos.